Exigen salida de la policía estatal de Juchitán
Gerardo Valdivieso Parada
Juchitán, Oax.- “Salió peor el remedio que la enfermedad” parecen concluir las personas inconformes con el actuar de la policía estatal, que tomó el control de la seguridad de esta ciudad desde el 21 de junio de este año, luego de hacer a un lado a la policía municipal quienes fueron trasladado casi en su totalidad a la capital del estado.
El clima de violencia no ha disminuido desde que la policía estatal vigila la ciudad, al contrario se ha acrecentado, el ritmo de las ejecuciones se mantiene llegando los asesinatos y atentados en pleno centro de la ciudad.
La extorsión y el cobro de piso, principal razón de la intervención del gobierno del estado en la ciudad, se mantiene, las amenazas a pequeños comercios siguen llegando a los propietarios, y los que han tenido la oportunidad de huir de la ciudad ante las amenazas a su integridad y de sus familias reportan que los que no han podido salir siguen pagando sus cuotas.
La falta de coordinación y agilidad de las fuerzas estatales se verifica en las ejecuciones casi diarias: llegan primero a la escena del crimen los medios y hasta los familiares que se llevan a sus muertos, antes que la policía estatal.
La ciudadanía se ha quejado que ante robos a sus casas que son reportados a la policía, ésta llega hasta dos horas después.
De sus operativos disuasorios en la ciudad, se acumulan las quejas por su prepotencia y abuso de su autoridad. Además de los grandes operativos en las que han apresado a personajes conocidos por tener una vida lícita, en la que la ciudadanía se sorprende de que se les vincule con un grupo criminal y a su jefe, sin que este, hasta ahora haya sido apañado cuando supuestamente ya lo tenían “acorralado”.
La policía estatal tiene una larga lista de detener a personas cuya único delito ha sido cuestionar el actuar de la policía, lo que los ha llevado a ser acusados primeramente de “resistirse al arresto” y después acusados de delitos más graves, no sin antes tener en la angustia a sus familiares, pues los retienen sin respetar sus derechos, como tenerlos aislados sin tener comunicación con nadie por más de 48 horas.
El incidente más reciente que indignó a los ciudadanos juchitecos, fue el arresto de Sergio Miguel González Santiago “Nacho Rei”, quien fue detenido mientras realizaba el cobro de adeudos atrasados de parte de una compañía de préstamos.
No se sabe el motivo de su detención, aunque se le detuvo con violencia, como lo evidenciaron vecinos que grabaron la acción de los policías. Los elementos le sustrajeron sus pertenencias, incluyendo el dinero de los cobros que había hecho.
La policía procedió como acostumbra, trasladó al detenido hasta sus instalaciones en El Espinal y luego la Ministerio Público y luego de vuelta a sus instalaciones, sin dar informes a los familiares, compañeros y amigos del detenido que se trasladaron hasta estos lugares referidos.
Los familiares sospecharon que a Nacho lo había golpeado por la negativa a que lo vieran y comunicarse con él para saber su estado.
Lo que indignó a sus conocidos, vecinos de la Octava Sección, fue que detuvieran a Nacho y lo trataran con violencia, cuando es conocido por brindar clases de zumba en espacios públicos en las poblaciones de la región, mantener una vida honrada y de trabajo para mantener a su joven familia.
Ante la arbitrariedad, sus familiares, amigos, vecinos y conocidos, cerraron la carretera a la altura del canal 33 para exigir su inmediata liberación y de paso solicitar al gobierno del estado la salida de la policía estatal de la ciudad.
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